lunes, 14 de julio de 2008

Un viaje al fondo de la tierra



En enero del año pasado, fuimos de paseo a Concepción, y tuvimos la oportunidad de visitar la pequeña ciudad de Lota, la que fuera el epicentro de la producción de carbón en Chile entre 1850 y 1960.

La ciudad tiene una rica historia llena de relatos sobre el trabajo de los mineros del carbón. El escritor Baldomero Lillo publicó el libro llamado "Sub Terra", el que contiene una serie de cuentos que transportan al lector a aquellos días en que los hombres tenían que bajar a las profundidades para subsistir. Famosas son las historias del peligro del gas Grisú, de que los trabajadores tuvieran que adquirir sus alimentos en las tiendas de los dueños de las minas, de los niños trabajadores, del Chiflón del Diablo, mina que debe su nombre al sonido que puede escucharse en su interior, y que es provocado por una corriente de viento.

En este paseo, fuimos al Chiflón del Diablo y ataviados con casco, batería y luz, fuimos conducidos por ex mineros descendiendo unos 40 metros en una especie de ascensor que conduce a la mina, y caminando despues por la cueva hasta su fondo.

Hubo un momento en que el guía nos pidió apagar las luces... y pudimos experimentar la oscuridad y silencio más absolutos. Su relato estaba lleno de historias terribles de niños sufrientes y de caballos que nunca vieron la luz del sol, pero también pleno de humor y del inolvidable hecho de que ahora se permite a las mujeres bajar a la mina, situación impensable en los tiempos de auge del carbón.


Desigualdad

Por muchos años y al igual que muchos, me mantuve ajena a la realidad que me rodeaba y que, sumida en mis cosas no podía ver. Hoy, cuand...