Queridos scouts:
Si habéis visto alguna vez la obra "Peter Pan", recordaréis cómo el jefe de los piratas siempre estaba pronunciando su discurso de despedida por temor de que cuando le llegara su hora no tuviera ya tiempo de compartirlo. Algo así me sucede a mí, y, aún cuando no me estoy muriendo en este momento, lo haré uno de estos días y quiero mandaros un mensaje de despedida.
Recordad, esto es lo último que oiréis de mí, por tanto meditadlo.
Pero el camino verdadero para conseguir la felicidad pasa por hacer felices a los demás. Intentad dejar este mundo un poco mejor de como os lo encontrásteis y, cuando os llegue la hora de morir, podréis morir felices sintiendo que de ningún modo habréis perdido vuestro tiempo sino que habréis hecho todo lo posible. Así, estad "Siempre Listos" para vivir felices y morir felices: aferraos siempre a vuestra promesa Scout, aún cuando hayáis dejado de ser muchachos, y que Dios os ayude a hacerlo así.
Vuestro amigo,
Baden-Powell